1. Decidir los Objetivos Política
El control solo es posible cuando están claramente
definidos los objetivos y no es posible si ellos y las políticas se cambian por
capricho.
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Los objetivos se deciden como resultado de una política. La política en la alta dirección es general, pero a medida que se irriga hacia abajo debe ser más y más concreta.
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La política debe tener un fundamento adecuado. No es "lo que creo", se basa en el estudio del mercado, la competencia, las encuestas, la capacidad técnica, los costos, las materias primas, etc,…
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Las políticas tienen prioridades. Pareto (los problemas vitales son pocos, los triviales abundan). Los problemas realmente importantes no son esporádicos, son los crónicos, a los que todo el mundo ha renunciado resolver.
No es suficiente con definir los objetivos, sin indicar
los métodos para alcanzarlos. No se puede dejar que las personas hagan lo que
crean necesario hacer.
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Las normas técnicas y operativas deben referirse especialmente a las causas.
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La Normalización se realiza para delegar autoridad, lo cual no implica delegación de responsabilidad. Cuando se delega no se deben dar más órdenes.
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Somos seres humanos si hay un error, no enfadarse sino invitar a los implicados a tomar acciones correctivas.
3. Educar y Formar
Esta es la acción fundamental para el progreso. Las normas
y reglamentos por si solas no corrigen, hay que educar y formar al personal en
ellas.
La educación fomenta el ámbito de control de las personas
y les hace cada vez más capaces de delegar autoridad. La formación y educación
se puede hacer:
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Formación en grupo.
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Formación en lugar de trabajo.
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Darle medios y motivar a las personas a que aprendan por sí mismas delegándoles la autoridad sobre su trabajo.
4. Hacer el Trabajo
5. Comprobar los resultados
Consiste en ver si el trabajo se está llevando a cabo de
acuerdo a las políticas, las instrucciones y los objetivos. Un buen directivo
comprueba los resultados.
Todo el que ocupa un cargo de autoridad debe definir
donde, cuando, que y como hacer verificaciones. Conforme todo mundo va
aprendiendo el control y se familiariza con él, se le deja que ejerza un control
por sí mismo.
El Gerente debe dejar en paz a los trabajadores cuando
este avanza con fluidez. Solo interviene cuando las cosas no van bien. En otras
palabras el control se basa en el principio de excepción para el directivo.
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Comprobar las causas. Frecuentemente dese un paseo por los puestos de trabajo y vea si todo se está realizando conforme a las políticas y normas (equipos, instrumentos, materias primas, sistemas de control automático, gráficos, etc..)
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Verificar a través de los resultados. Comprobar si el trabajo y los procesos avanzan bien, examinando los resultados.
Materiales: Especificación de Materias Primas, Materiales en Proceso y Producto Terminado.
Mano de Obra y Equipo: Indicadores: Cantidad de Producción, Desperdicio, Eficiencia, M.O.,etc..
6. Acometer una Acción
Las causas de anomalía deben ser descubiertas y eliminadas
del proceso. Las razones pueden ser:
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El operario es responsable por descuido o no es consciente que debe ajustarse a las normas.
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Se ha proporcionado formación y educación insuficiente en cuanto a las normas.
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Las normas son inadecuadas o imposibles de seguir.
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