Objetivos Corporativos
Los objetivos son
los propósitos, metas, fines o misiones que se han establecido para el
negocio en su conjunto. Determinan los puntos hacia los cuales se
dirigen las operaciones futuras.
Los objetivos corporativos se desarrollan bajo cuatro denominaciones
1. El propósito o misión de la compañía.
2. Objetivos económicos y financieros.
3. Objetivos de propiedad.
4. ¿En que negocio estamos?
Una vez que se
conocen los factores claves del negocio, se pueden derivar los objetivos
estratégicos. Si ya se sabe que el índice de morosidad es uno de los
factores claves del negocio de las entidades financieras, uno de los
objetivos se centrará en la forma de mantener siempre la liquidez y de
la misma manera se procede con todos los demás factores claves del
negocio.
Si se tienen
cuatro o cinco factores claves del negocio se tendrá un número similar
de objetivos y de planes de acción, pero si se desconocen estos
factores, cualquier intento de implementar estrategias generará
problemas.
Cada uno de estos planes de acción se conoce como alternativas estratégicas
y cuando se tienen varias de ellas, es necesario someterlas aun proceso
de evaluación y viabilidad tomando en cuenta los diversos factores del
ambiente y los internos como los recursos, el presupuesto y los plazos.
Una vez que se han determinado claramente los objetivos, se está en
capacidad de generar la estrategia.
A) Tácticas y estrategias
La estrategia es
la que indica qué es lo que se quiere alcanzar en términos de objetivos y
la táctica es la descripción de las actividades que se deben realizar
para implementar la estrategia.
El objetivo
estratégico del gobierno del Perú era liberar a los rehenes que estaban
el la Embajada del Japón. Era un objetivo mucho más complejo y difícil
que el hecho de sacar a los captores. La estrategia en cuestión se
centraba en neutralizar a los captores con el menor número de bajas para
el gobierno. Entre las tácticas estaban el espionaje con
radiotransmisores, el dragado de túneles, el envío de fuerzas de choque,
etc.
Dentro de la
selección de estrategias, otro aspecto a considerar es la estructura de
la organización, si e compleja en lo vertical u horizontal, en lo
geográfico o lo espacial, si la estrategia requiere un tipo de
estructura molecular o plano o por proyectos ¿es posible implementarla?
Como un último
aspecto se deben analizar las probabilidades de éxito. En el caso de los
rehenes la meta era, en el mejor de los casos, salvarlos a todos y en
pero, tener la menor cantidad de baja. Como para la consecución del
objetivo solo se produjo un a baja en el gobierno, se considera que el
operativo fue exitoso. Es muy probable que la valoración inicial hay
considerado el perder a uno o vario rehenes y se haya decidido correr el
riesgo.
Un problema común
en las instituciones públicas es que no se corren riesgos y se pierden
las posibilidades, lo mismo sucede cuando no se tiene una organización
flexible capaz de explotar las oportunidades que surgen.
Si se determina
que una estretegia no es viable porque no lo permite el presupuesto o la
estructura o cualquier otro factor, se descarta y se inicia el proceso
con una nueva alternativa estratégica. Puede que de ocho o diez
alternativas iniciales solo tres resulten aplicables. Una vez que se han
definido las estrategias viables, corresponderá a los técnicos su
puesta en práctica
B) Actividades de Control
Para monitorear la buena marcha del plan estratégico se pueden los siguientes tipos de acciones:
1. Actividades operativas. Por ejemplo en una fábrica es definir la cantidad de tornillos que se van a producir cada mes.
2. Actividades gerenciales o administrativas.
Se trata de indicadores como el retorno sobre la inversión, la rotación
de los inventarios, los días de cobro, etc. Este es uno de los métodos
preferidos.
3. Actividades estratégicas. Son
las más importantes y las más olvidadas, son las que permiten
monitorear el rumbo que lleva el plan estratégico tanto en las
reacciones de los públicos internos como de los externos.
Plan de contingencia
Es un plan alterno
en caso de que no se den las condiciones que se habían planteado. Es un
"As bajo la manga". Siempre se deben prever varios escenarios de
acuerdo con las probabilidades y también se debe prever el caso de que
las primeras opciones fallen. En un caso de estos, el plan estratégico
sabe salir adelante.
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